Un numeroso grupo de manifestantes se congregaron este domingo en Venecia para protestar en contra de las nuevas barreras situadas en el único punto de entrada terrestre en la ciudad, con el objetivo de controlar el número de turistas que acceden al lugar, en contra de las recientes medidas que convierten a la ciudad en zona netamente turística.
Al menos treinta personas protestaron por considerar que el Ayuntamiento tiene por objetivo convertir a Venecia en un “parque temático”, solo para darle un “uso turístico”, dejando a un lado sus valores e historia.
En esta protesta estuvo incluida la organización de extrema izquierda Morion, quienes a través de sus distintos voceros afirmó que “los venecianos no requieren puertas en la ciudad” sino “casas y políticas de fomento de la residencia”, dado que culpan al turismo de la escasez de vivienda para alquiler o compra a causa del muy elevado flujo turístico.
En la manifestación algunos jóvenes lograron incluso arrancar una de las barreras a pesar de estar custodiadas por la policía, según informan los medios locales. Las autoridades han ubicado dos barreras en las inmediaciones de la estación de Santa Lucía, único punto de llegada por tierra: una en la Plaza Roma, junto al puente de Santiago de Calatrava, y otra en la parte opuesta, ante la iglesia de los Descalzos.
Actualmente Venecia recibe anualmente a 30 millones de personas frente a sus 50.000 habitantes y ya ha experimentado métodos de control turístico como la aplicación del aforo máximo durante el pasado carnaval, celebrado en el mes de febrero.