EE.UU. investiga el tiroteo que el sábado dejó al menos 20 muertos en El Paso, ciudad fronteriza con México, como un caso de “terrorismo doméstico” y “delito de odio”, por los supuestos vínculos del tirador con un manifiesto en el que se critica “la invasión hispana de Texas”.
El Paso es ciudad fronteriza con México con cerca de 700.000 habitantes y según datos del censo, más del 80% de la población es de origen hispano.
“Estamos tratando esto como un caso de terrorismo doméstico, y vamos a hacer lo que hacemos a los terroristas en este país, que es ofrecer una justicia rápida y segura”, según indicó John Bash, fiscal federal para el distrito oeste de Texas, en una rueda de prensa en El Paso.
“Puedo decirles desde el principio que el cargo estatal es asesinato capital, entonces él (el atacante) es elegible para la pena de muerte”, dijo el fiscal del distrito Jaime Esparza, quien compareció junto a Bash. “Pediremos la pena de muerte”.
“Invasión hispana de Texas”
Previamente, los investigadores habían apuntado a un posible vínculo del sospechoso de la masacre, Patrick Crusius, con un manifiesto publicado en internet en el que se critica “la invasión hispana de Texas”.
Agencias