El nuevo Gobierno español, el primero de coalición en la reciente historia de España, presidido por el socialista Pedro Sánchez, tomó posesión este lunes ante el rey Felipe VI, con lo que se pone fin a más de ocho meses de bloqueo político y dos elecciones generales.
Los cuatro vicepresidentes y 18 ministros del nuevo gabinete prometieron sus cargos en el Palacio de la Zarzuela, residencia oficial del monarca.
Este nuevo ejecutivo es fruto de una coalición entre el partido socialista (PSOE) y la formación izquierdista Unidas Podemos (UP), lo que ha provocado fuertes críticas entre el bloque de la oposición de derecha (el conservador PP, el liberal Ciudadanos y el ultraderechista Vox).
En el nuevo gabinete de Sánchez hay cuatro ministros de UP, más el líder de este partido, Pablo Iglesias como vicepresidente segundo de Derechos Sociales y Agenda 2030, y ocho ministros repiten en el cargo.
El rey, tras finalizar el acto, dio a los nuevos ministros la «enhorabuena» y les deseó «mucha suerte» en el ejercicio de sus nuevas funciones.
Todos los miembros del Gabinete respetaron la fórmula habitual de promesa o jura de sus cargos, en el que se incluye su compromiso de lealtad al rey y de guardar y hacer guardar la Constitución, pese a que muchos de ellos son declarados republicanos.