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De acuerdo a los datos obtenidos en la consulta ciudadana realizada por el Observatorio Ciudadano de Políticas Públicas Municipales “La Gente Propone” en el municipio Iribarren durante el mes de junio 2021, las parroquias Cují y Tamaca fueron las más afectadas por la deficiencia en la recolección de desechos sólidos, donde la frecuencia de las unidades recolectoras adscritas al Instituto Municipal de Aseo Urbano y Domiciliario de (IMAUBAR) y la empresa privada FOSPUCA se ha visto afectado debido a la escasez de combustible, lo cual incide en la disminución de rutas programadas.
Indicaron que las rutas de ambas empresas han sido reestructuradas, debido a la disminución en la operatividad de unidades compactadoras en el Municipio, aumentando los tiempos de espera de la población que habita en las parroquias foráneas quienes claman por mejoras en la recolección de desechos, situación que, contribuido con el aumento de vertederos a cielo abierto, generando en las comunidades focos de contaminación y proliferación de roedores.
Ante esta situación, el ciudadano Edgar Adarfio, habitante de la Urbanización Brisas de Carorita II de la parroquia El Cují, motivado por buscar una solución ante el incremento, acumulación y la quema de basura en su comunidad, decidió desarrollar en julio del 2020, una alternativa de recolección de desechos basado en el reciclaje, donde en colaboración con sus vecinos y la empresa recicladora ARS Reciclado, decidieron colocar en un lugar estratégico de la comunidad dos “Sacas” o bolsas recolectoras de gran tamaño, donde se colocan los desechos previamente clasificados de plástico y cartón, para su acumulación ordenada y posterior recolección por parte de la empresa.
Esta iniciativa promueve una relación ganar- ganar entre los ciudadanos y la empresa recicladora, quien otorga a la comunidad el valor monetario del peso del material recolectado cada 20 días. Los recursos obtenidos, van directamente al fondo comunitario o condominio de la urbanización Brisas de Carorita II, y son utilizados para solventar gastos colectivos, tales como vigilancia, limpieza de áreas verdes y comunes, entre otros.
Esta buena práctica ciudadana, representa un logro comunitario, porque hace de la urbanización Brisas de Carorita II, una comunidad ecológica y autosustentable, y está siendo un modelo a replicar en otras comunidades dentro y fuera de las parroquias Cují y Tamaca.
