Los pacientes oncológicos en las distintas etapas de la enfermedad pueden atravesar sentimientos y emociones tan diversos como incertidumbre, culpa, ansiedad o tristeza, según señalan especialistas en la salud mental. Generalmente, estos procesos emocionales también afectan a los familiares y amigos.
La médico psiquiatra de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV), doctora Susana Arocha, explicó que “quienes padecen de cáncer llegan a tener emociones muy diversas y es un tema complejo. Estos cambios comienzan desde que aparece algo, un síntoma o signo, que lleva al paciente a la consulta de un médico. Entra entonces en un proceso difícil y a medida que transita las diferentes etapas (evaluaciones, diagnóstico, tratamiento), las emociones pueden variar y son distintas de un paciente a otro”.
Acotó que “la incertidumbre, el miedo, la ansiedad, la culpa, el mal humor, la rabia, la desesperanza, la tristeza y la depresión pueden presentarse, variando de acuerdo con cada persona y las condiciones de su enfermedad”.
Indicó que la respuesta emocional de cada paciente dependerá de aspectos como el apoyo con el que cuenta, la edad, la personalidad, las creencias religiosas y espirituales, su actitud ante la vida, y de trastornos o patologías previas.
La doctora Arocha aseguró que los planes de vida cambian para toda la familia y tanto el diagnóstico de cáncer como su tratamiento afectan igualmente a los familiares, quienes pueden presentar los mismos síntomas mencionados, por lo cual es importante hablar, informarse bien sobre la enfermedad y los tratamientos, apoyarse mutuamente, comprender lo que sucede y, de ser necesario, recibir ayuda especializada para afrontar esta situación.
Resaltó que “si el paciente tiene hijos o hay niños en la familia, es importante que, dependiendo de su edad, se hable con ellos lo más claro que se pueda sobre el tema, y es fundamental que en lo posible no dejen sus actividades cotidianas”.
De acuerdo con los estudios científicos que ha consultado, la doctora Arocha señaló que aproximadamente 48% de los pacientes oncológicos llegan a presentar ansiedad y entre 16 % y 25 % atraviesan depresión.
Información clara
La médico psiquiatra afirmó que “mientras la persona tenga información clara de su médico tratante sentirá menos ansiedad o miedo y estará más en control de la situación. Hay que resaltar que la incertidumbre hace que aumente la preocupación, el mal humor y el miedo, por ejemplo. Mientras más seguridad sienta el paciente, afrontará mejor la enfermedad”.
Puntualizó que, por ello es importante la buena y fluida comunicación del paciente con su oncólogo sobre todos los aspectos de su enfermedad. Señaló que el especialista debe resaltar cuando el pronóstico es bueno, con buena respuesta al tratamiento, ya que disminuye la ansiedad y el paciente se encontrarán en mejores condiciones para afrontarlo.
Recomienda a los pacientes oncológicos mantenerse en el presente, evitando pensar en “si hubiera hecho o pudiera hacer esto o aquello”, y hablar con su familia y amigos acerca de lo que le está sucediendo, pedir apoyo si lo necesitan, mantener sus actividades y rutinas normales en la medida de lo posible, así como también buscar ayuda cuando haya malestar emocional.
Insistió la doctora Arocha que “ante la presencia de síntomas como insomnio, inapetencia, aislamiento o apatía, y cuando el paciente tenga llanto frecuente, ansiedad o tristeza que le produzca malestar, es aconsejable que acuda a consulta especializada”.