El Presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, disolvió la Asamblea Nacional mediante el decreto 741 por «grave crisis política y conmoción interna» y solicitó al Consejo Nacional Electoral convocar elecciones legislativas y presidenciales para el resto de los períodos.
Según reza el decreto, “conforme el artículo 148 de la Constitución de la República, la calificación de la ocurrencia de la causal de grave crisis política y conmoción interna es atribución exclusiva del presidente de la República, sin que se requiera otro pronunciamiento o requisito previo”.
«Es una decisión democrática y constitucional (…) le devuelve al pueblo ecuatoriano el poder de decidir su futuro en las próximas elecciones»; aseguró el mandatario.
«Debemos avanzar hacia una solución que ofrezca esperanza a la familia ecuatoriana (…) Hoy, es un día en el que tengo la obligación de dar una respuesta a la crisis política«; dijo Lasso en un pronunciamiento.
Lasso, afirmó que la decisión de la Asamblea Nacional es para «usurpar» la presidencia de Ecuador y tomar todos los poderes. «No es fiscalización, es una constante obstrucción».
El Parlamento tenía previsto continuar hoy la sesión de su pleno que aborda el juicio político de censura contra Lasso, acusado de peculado (malversación) en empresas del Estado, que él niega.
La suspensión se aplicó tras haber escuchado a 39 legisladores inscritos para el debate de réplica al alegato en su defensa que presentó Lasso en la tarde.