La ola de calor ocasionada por el anticiclón africano, al que han llamado «Caronte», y que está afectando a gran parte del Mediterráneo europeo, elevará desde hoy las temperaturas en Italia a máximas que rondarán los 47 grados.
Se espera que en los próximos días en las islas de Sicilia y Cerdeña se romperán récords históricos en algunas partes del país.
Las previsiones apuntan también a que las temperaturas alcanzarán máximos nunca vistos en Roma con hasta 42 grados, 1,3 más que el anterior récord registrado en junio del año pasado (40,7 grados), aunque en los próximos días, pues hoy no se superaron los 37 grados, según los medios locales.
Sin embargo, pese a las elevadas temperaturas, la actividad en las calles romanas no decae y la ciudad permanece abarrotada de turistas que intentan sobrevivir al calor entre el bullicio de la capital italiana.
Las sombrillas, las botellas de agua, la crema solar y la paciencia se han convertido en elementos imprescindibles para resistir las largas colas de acceso a las principales atracciones turísticas de la capital.