10 años soportando los fuertes olores y las graves consecuencias de salud de un bote de aguas servidas tienen los habitantes de la calle 52 de San Vicente al oeste de Barquisimeto.
Olores nauseabundos se emiten desde un bote de aguas servidas que existe en la calle 52 entre vereda 6 y 7 de San Vicente, habitantes aseguran que a pesar de las constantes notificaciones del caso a la Hidrológica del estado Lara no han sido tomados en cuenta.
Agregaron que la cantidad de moscas, mosquitos e insectos se han incrementado en los hogares a raíz de esta situación y que los principales afectados han sido los niños y personas de la tercera edad que habitan en la comunidad.
Adelina Marín, habitante afectada, resaltó que varios habitantes han tenido que realizar pozos sépticos en sus hogares sin embargo, concuerdan en que dicha acción no es una solución viable para la comunidad.