La Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV), pilar y esperanza en la lucha contra el cáncer en el país, ha dependido históricamente de las donaciones para mantener sus programas d educación, prevención, detección temprana, diagnóstico y tratamientos, así como para la formación de médicos especialistas y dar apoyo a pacientes para la cura de su enfermedad.
El gerente general de la SAV, doctor Juan Saavedra, señaló que “desde 1948, durante estos 76 años de funcionamiento de nuestra institución, los cuales se van a conmemorar en noviembre próximo, las donaciones han jugado un papel crucial para sostener todos los programas que hacemos, son las que han permitido que la organización se haya mantenido y sea sustentable en el tiempo”.
A lo largo de los años, la Sociedad Anticancerosa de Venezuela (SAV) ha utilizado diversas estrategias para recaudar fondos, como programas de radio y televisión (Telemaratón), el Gran Bono de la Salud y alianzas con instituciones públicas y privadas.
El doctor Saavedra indicó que, “se lograban donaciones provenientes de instituciones públicas y privadas, incluyendo algunas del sector bancario, así como de benefactores nacionales e internacionales, y esto sigue ocurriendo, pero la crisis económica que ha vivido el país ha impactado significativamente el volumen de esas donaciones, lo que ha dificultado el desarrollo de los programas y actividades de la organización”.
Con esas donaciones la SAV desarrolla programas como el de Ayuda Integral al Paciente Oncológico (AIPO), así como el de los fellows o becarios, mediante el cual se forman médicos especialistas en oncología.