El cycling se ha convertido en una de las actividades físicas más completas y beneficiosas para la salud. Según un estudio publicado en el British Journal of Sports Medicine, practicar esta disciplina de forma regular reduce significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y algunos tipos de cáncer.
Además de fortalecer el corazón y los pulmones, el cycling o ciclismo de salón tonifica los músculos, mejora la postura y reduce el estrés.
Según Jorge Vásquez, entrenador personal de la Cadena de Salud y Bienestar, Golds Gym, “los principales beneficios del cycling son aporte de longevidad, resistencia cardiovascular, bienestar y satisfacción personal. Pedalear de manera regular aporta una serie de ventajas a nuestro organismo que van más allá de quemar calorías”.
Múltiples beneficios
Corazón de acero: El cycling fortalece el corazón, mejora la circulación y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión y los infartos.
Pulmones de hierro: Al aumentar la capacidad pulmonar, el cycling mejora la oxigenación de los tejidos y favorece un mejor rendimiento físico.
Músculos tonificados: No solo las piernas se benefician del cycling, también los glúteos, el core y los brazos se fortalecen con cada pedaleada.
Articulaciones sanas: Al ser un ejercicio de bajo impacto, el cycling es ideal para personas con problemas articulares, ya que no somete a las articulaciones a un gran estrés.
Reducción del estrés: Pedalear es una excelente manera de liberar tensiones y reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
Mejora del sueño: La actividad física regular, como el cycling, favorece un sueño más profundo y reparador.
Avalado por la ciencia
Basándose en su experiencia, Jorge Vásquez afirma que “a través de la frecuencia cardíaca el practicante obtiene mejoras considerables”. Y es que numerosos estudios respaldan los beneficios del cycling para la salud.
Otra de las grandes ventajas del cycling es que es una actividad accesible para personas de todas las edades y condiciones físicas. “No hay barreras para que el practicante realice esta actividad”, asegura Vásquez.