La Organización Mundial de la Salud dijo este martes que sólo ocho hospitales siguen funcionando de manera mínima en las áreas del noroeste de Siria afectadas por el nuevo foco de hostilidades que ha estallado entre la alianza islamista Organismo de Liberación del Levante y las fuerzas gubernamentales y sus aliados.
Hace tan sólo una semana, 109 centros de salud prestaban servicios, en gran medida gracias a las inversiones que había realizado la OMS y otros donantes en los últimos años para volver a poner de pie la atención médica en esa zona tan golpeada por la guerra civil que desde hace catorce años sacude Siria.
La Organización Mundial de Salud destacó que los hospitales que funcionan están desbordados con casos de traumatismos, con miles de heridos ingresados sólo en los últimos cuatro días y médicos y enfermeras trabajando sin descanso para salvar vidas, incluso con gran riesgo personal para ellos y sus familias.